La similicadencia es una figura literaria, en que se cuida la dicción y da elegancia al texto, usando la semejanza, en la conclusión de cada verso en poesía o cada frase en prosa, con nombres utilizados en casos iguales, o verbos conjugados en el mismo tiempo y persona.
Ejemplo de similicadencia:
Prosa (similicadencia por conjugación y persona verbal):
Pasemos el tiempo libre leyendo; Las noches, descansando; Las horas hábiles trabajando; y los momentos con quienes queremos, amando.
Verso (similicadencia por nombre):
Por sus ojos, María,
Por sus brazos, Alicia,
Por sus besos, Lucía,
Y por toda ella, Felicia.